Existen aspectos de nuestra propia naturaleza que han sido rechazados desde hace muchos años. Aspectos catalogados como inmorales, negativos, desagradables, vergonzosos o despreciables. A pesar de su rechazo, estos aspectos no desaparecen sino que van a algún lado de nuestro mundo psicológico y desde allí, actúan sin nuestro control o consciente.
FUERZAS DE LA NATURALEZA
La naturaleza está compuesta de formas opuestas, contrarias: frío, calor; sequía-humedad; muerte-vida; día-noche, etc. Imagínate por un segundo que una de esas energías desapareciera y quedara solo la contraria: imagina que pasaría si el mundo quedara en una temporada de sol, y jamás volviera a llegar la lluvia. ¿Qué pasaría? En lo primero que pensamos es en un desastre natural. Esto significa, que ambas energías, con independencia de si nos gustan o no, son necesarias para la existencia y la vida misma. Ahora bien, como un reflejo de la naturaleza, en ti también existen energías opuestas y complementarias: amor-odio; energía-agotamiento; generosidad-egoísmo; movimiento-quietud; alegría-tristeza, etc. Imagina, como en el ejemplo anterior, que tu quedaras solamente con una de esas energías y la otra desapareciera. Pensarás que si te quedas solamente con la generosidad, el amor o el movimiento, vas a estar siempre bien y estable. Sin embargo, al igual que la naturaleza, caerías es un desbalance que te llevaría a tu propio “desastre. A lo largo de este Módulo te voy a explicar por qué todas las energías son necesarias, incluyendo aquellas que no nos gustan o consideramos como malas o negativas.